¿Qué es un TCA?
Los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) son trastornos mentales que se originan a causa de varios factores, originados por la interacción de diversas causas de origen psicológico, familiar, biológico y sociocultural.
Las personas que lo padecen tienen consecuencias a nivel social, psicológico y físico. Las personas afectadas por este trastorno, suelen tener insatisfacción corporal, miedo a perder el control, vergüenza y rechazo hacia su problema.
Las personas con más probabilidades de padecer este trastorno son las mujeres, iniciándolo en la adolescencia. Eso no significa que no puedan padecerlo hombres o que no pueda aparecer más tarde, solo que en mujeres adolescentes es cuando hay una mayor prevalencia.
Los TCA, suelen ir acompañados de depresión, trastornos de ansiedad y en ocasiones, abuso de sustancias. Estos trastornos, por lo tanto, requieren de un tratamiento largo y complejo, multi- e interdisciplinar (varios profesionales de la salud), como médicos, psicólogos, psiquiatras, nutricionistas, enfermeros, etc.
¿Cuáles son los TCA más comunes?
Existen varios tipos de trastornos alimentarios, pero los más comunes son: la Anorexia nerviosa, la Bulimia nerviosa, el Trastorno por Atracón y los Trastornos de la conducta alimentaria no especificado (TCANE) en los que entran TCA que no cumplen un criterio diagnóstico específico.
¿En qué nos debemos fijar?
Hay algunos comportamientos o señales que pueden hacernos saltar la alarma de que alguna persona no tiene una relación saludable con la comida y puede padecer un TCA. No son criterios diagnósticos, pero si puede darnos pistas.
- Perdida de peso de forma injustificada.
- Práctica de actividad física de forma compulsiva para adelgazar.
- Uso excesivo dietas restrictivas.
- Preocupación constante por la comida y gran interés por la cocina.
- Sentimiento de culpa después de haber comido.
- Comportamientos alimentarios extraños (comer muy lento, cortar en muchos trozos la comida…).
- Encerrarse en el baño justo después de comer, junto con un aumento del tiempo que pasa allí.
- Evita comidas familiares, sociales…
- Encontrar comida escondida en su habitación o se encuentran grandes cantidades de envoltorios o restos de comida.
- La comida de casa se acaba muy rápido.
- Consumo de laxantes y diuréticos.
- Desaparición de la menstruación.
Todas estas acciones pueden alarmarnos de qué algo está sucediendo con esa persona. En este caso, recomendamos que se acuda cuanto antes a un médico por tal de valorar a la persona y ponerla en manos de profesionales cuanto antes.