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No hay más que ver como se va haciendo cada vez más grande el pasillo del supermercado donde encontramos este tipo de bebidas vegetales. Está claro que cada vez compramos y bebemos más bebida vegetal. 

Pero, ¿sabemos qué son las bebidas vegetales? 

Este aumento en el consumo de bebidas vegetales puede deberse a varios motivos, algunos justificados, otros no tanto. Un motivo muy habitual es por la concienciación de un consumo más vegetal y menos animal. Éste muy bien. Otro motivo parecido es por la concepción de que la leche es perjudicial para la salud. Éste no tan bien.

Primero de todo, a pesar de los miles de intentos de poner a la leche como la mala de la película (sin entender bien el motivo, quizás también esta Bill Gates, Soros y el 5G detrás, quien sabe); no hay motivos científicos y evidentes para pensar así. A no ser que tengas una patología en la que el consumo de leche puede ser perjudicial, como la alergia a la proteína de vaca. Además nutricionalmente no se puede comparar ya que no es lo mismo, es como comparar una silla con una alfombra.

Cierto es, que somos mucho de tradiciones, y aquí toda la vida se ha desayunado con un vaso de leche (con colacao, no vayamos a obviarlo) y si eliminamos la leche parece que nos falta el vaso con el líquido blanco. 

Una bebida vegetal es una bebida hecha con agua y con un vegetal (entre un 2 y un 17%). En función del vegetal las cualidades nutritivas cambian:

  • Base vegetal de legumbres: La soja es la más típica. Tienen un contenido más rico en proteínas. 
  • Base vegetal de cereales o pseudocereales, como la avena o arroz. Son más ricas en azúcares (naturalmente presentes, en teoría).
  • Base vegetal de frutos secos o semillas: almendra, sésamo, nueces, avellanas…Son más ricas en grasas.
  • También las hay que mezclan ingredientes de distinta naturaleza.

Entonces, ¿cuál hay que elegir?

  • Fíjese en la cantidad de materia prima que lleva. Cuando compra una bebida vegetal con un 2 o 5% quiere decir que realmente está bebiendo agua prácticamente. A precio de oro, eso sí. ¿Cómo lo puedo saber? En los ingredientes pondrá agua y el vegetal en cuestión con un porcentaje, esa es la cantidad de vegetal que lleva esa bebida. 
  • Sin azúcares añadidos. Muchas de las bebidas suelen llevar azúcares de más. Para saberlo también nos tenemos que ir a los ingredientes. Si lleva azúcares lo pondrá.
  • Sin sabores, ni edulcorantes. 

La bebida vegetal es una opción más dentro de la alimentación. Pero hay que tener en cuenta una cosa, que es una bebida. Como pasa con los zumos, los nutrientes no se encuentran en una matriz si no que están dispersos en agua. Al cuerpo no le cuesta nada digerirlo. Por eso mismo hay que tener cuidado con los azúcares, aunque sean naturalmente presentes. Y también con las calorías, ya que los líquidos sacian bastante menos que los alimentos sólidos. 

El otro día os hablaba sobre que son las patologías digestivas, hoy vamos a hablar un poco sobre el origen de estas.

https://www.eufic.org/es/healthy-living/category/gut-health-and-digestion

Su origen es disperso y multifactorial

El origen de estas enfermedades es muy disperso ya que puede ser multifactorial (en muchos casos hay más de una patología digestiva a la vez o una es la causante de otra). Aun así algunos de los factores de riesgo que predisponen a sufrirlas son comunes en casi todas: factores genéticos, ambientales, dietéticos, psicosomáticos e infecciosos.

Malos hábitos alimentarios

Algunos de estos factores son los mismos que se relacionan con una mala calidad de vida y con las 5 primeras causas de mortalidad prevenible:

  • Seguir una dieta rica en grasas insaturadas y baja en fibra. Este tipo de alimentación se relaciona con más incidencia de cáncer y otras patologías ya que aumenta la inflamación intestinal y empeora la calidad de la microbiota intestinal.
  • Padecer sobrepeso y obesidad aumenta la probabilidad de padecer estas enfermedades.
  • El consumo de tabaco y/o alcohol empeora la salud digestiva haciendo que no podamos absorber y digerir correctamente los alimentos, aumentando la inflamación crónica y variando la microbiota y el pH del organismo (entre otros).
  • El consumo excesivo de AINE’s nos predispone a un mayor riesgo de sufrir infecciones digestivas y, en consecuencia, aumenta la posibilidad de padecer otro tipo de patologías digestivas.
  • El estrés crónico nos puede llevar a una mala alimentación, unido a una mayor inflamación intestinal y una peor calidad de la microbiota. Además nos impide absorber algunos micronutrientes como deberíamos y aumenta la probabilidad de sufrir enfermedades digestivas (entre otro tipo de enfermedades).
  • Mantener una vida sedentaria, igual que los otros factores de riesgo, empeora nuestra salud digestiva y predispone a sufrir distintas enfermedades.
https://www.oecd-ilibrary.org/social-issues-migration-health/espana-perfil-sanitario-del-pais-2019_2a8a83c8-es;jsessionid=GuG08i9lIxVklf7FkbTGmLja.ip-10-240-5-104